Hora de reaccionar en colectivo

Al parecer en el mundo algunos sujetos están interesados en la llegada del apocalipsis; es decir, desean que el fin del mundo sea lo más pronto posible. Lo vemos en los intereses guerreristas de los Estados Unidos junto a su infame aliado Israel y algunos países de la triste celebre Unión Europea que en medio de una gran crisis energética y financiera, pretenden generar una guerra en Medio Oriente que indiscutiblemente tendrá repercusiones a escala mundial.

El país Islámico de Irán ha mantenido una postura muy firme y ha sabido manejar con mucha inteligencia las provocaciones lanzadas internacionalmente en su contra. Esta nación puede considerarse como el último bastión, la última fortaleza, que realmente tiene la capacidad de enfrentar a los intereses imperiales y frenar el afán de EEUU por reafirmar su estatus de potencia mundial.
De ninguna manera podemos hacer una crítica superficial a las políticas guerrerista de los EEUU y sus aliados y creer que son acciones aisladas que nacen de la nada. Debemos revisar el pasado para comprender un poco las acciones que se han venido cometiendo y que no existe ninguna pequeña muestra de intensión de detener los planes expansionistas a costas de cualquier cosa, lo cual permite pensar sin ninguna duda, como ya lo han visualizado muchas otras personas, llevarán a la humanidad a su destrucción.
La unificación de intereses entre los gobernantes Israel y los EEUU es evidente desde hace varias décadas. Al respecto el investigador Thierry Meyssan afirma, en su libro La Gran Impostura II, que el “pensamiento estratégico sionista y los intereses energéticos estadounidenses se van fusionando progresivamente: para extender el territorio del primero e imponer el poder de los segundos, resulta conveniente acabar con el actual orden de las cosas”.
El anterior señalamiento tiene como base la teoría que elaboró Robert Strausz-Hupé en un manifiesto en 1957. En las siguientes líneas se van a exponer textualmente de que se trata dicha teoría y ustedes podrán interpretar y juzgar desde su propio punto de vista:
El objetivo para Estados Unidos es unificar el mundo bajo su liderazgo durante el transcurso de esta generación. La eficacia y la rapidez con que Estados Unidos cumpla esa tarea determinarán la supervivencia de Estados Unidos como potencia líder, probablemente la supervivencia de la Cultura occidental, y quizás la de la humanidad. La misión del pueblo americano consiste en enterrar los Estados-naciones, guiar a sus enlutados pueblos hacia uniones más amplias, e intimidar con su poderío las veleidades de sabotaje contra el nuevo orden mundial.En los próximos 50 años, el futuro del mundo le pertenece a América. El imperio americano y la humanidad no serán dos conceptos contrapuestos, sino que serán simplemente dos nombres diferentes de un nuevo mismo orden universal bajo el signo de la paz y la felicidad.( La Gran Impostura II)
¿Nos encaminamos sumisamente a ese mundo? Dependerá de nuestra voluntad para reaccionar y presionar para impedir ese nuevo orden que se pretende imponer. No se puede seguir viviendo sumiso por el miedo.


Editorial antorcha roja